De la noche de Septiembre

Tomado del poema "Una noche cualquiera de Septiembre" va en décimas octasílabas este trabajo de Walter González.

Son las nubes invisibles
un teclado desbordante,
un haz de espuma lactante,
voces ininteligibles…

Sus ojos son dos fusibles
quemados, cielo perdido…

buscar su piel he querido
y sus párpados secar,
sus caricias son un mar
con las olas del olvido…

Un eclipse es conversión
de luz a lecho espontáneo,
tinta negra sobre un cráneo,
y un dibujo de carbón.

Dos huellas bajo el balcón
de mi ventana y dos pies
de astro, de nieve talvéz,
de ave, de luz, de universo
de cielo, de intro disperso,
de aire… la calle después.