Vuela un ave al infinito
como saliendo del paso
transitorio de un ocaso
que transmuta el tiempo en rito.
Vuela el ave del escrito
vertido en líneas de un guión.
Una noche y un ciclón,
una lluvia pasajera,
vuela el ave compañera
a la próxima estación
Ojala decir pudiera
estas líneas sin que el vuelo
tiñera líneas de duelo
en la nube mañanera,
ojala que un sueño fuera
con eterno despertar
para al fin ovacionar
con merecido homenaje
al ave sin equipaje
que voló para esperar…
esperar en nueva playa
donde todos sus amigos,
aves sin otros abrigos
que el arte y la luz que calla,
llegaremos y la valla
que nos divide será
un recuerdo del que ya
no veremos una estrella,
mientras, aquí está la huella
en que siempre vivirá.
como saliendo del paso
transitorio de un ocaso
que transmuta el tiempo en rito.
Vuela el ave del escrito
vertido en líneas de un guión.
Una noche y un ciclón,
una lluvia pasajera,
vuela el ave compañera
a la próxima estación
Ojala decir pudiera
estas líneas sin que el vuelo
tiñera líneas de duelo
en la nube mañanera,
ojala que un sueño fuera
con eterno despertar
para al fin ovacionar
con merecido homenaje
al ave sin equipaje
que voló para esperar…
esperar en nueva playa
donde todos sus amigos,
aves sin otros abrigos
que el arte y la luz que calla,
llegaremos y la valla
que nos divide será
un recuerdo del que ya
no veremos una estrella,
mientras, aquí está la huella
en que siempre vivirá.
(En la fotografía: Dr. Chong Ging Lee, Salomón Gómez (Q.E.P.D.) y Walter González)
1 comentario:
Es una gran pérdida... es triste.
En fin, pero yo les traigo un premio por todos los comentarios que no he colocado, pero que no significan que no los haya leído.
En mi blog está la información.
Apapachos
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